ORTOPROTEX. Un proyecto innovador creado por y para los discapacitados

02 Ene ORTOPROTEX. Un proyecto innovador creado por y para los discapacitados

Por Epi Amiguet

Como tantos otros proyectos de innovación, este caso es fruto de la necesidad y del ingenio. Pero éste, en concreto, también lo es especialmente de la ilusión: el deseo de un colectivo por sentirse plenamente integrado en la sociedad empezando por algo tan esencial como es el poder valerse por sí mismos en el mundo laboral.

Resumiendo mucho, podríamos decir que esta historia empieza hace cuatro años, el día en que el anterior presidente de la Asociación Plataforma sin barreras, Felipe Pablo, ya fallecido, coge el teléfono para reclamar a una empresa barcelonesa, que ha tardado 45 días y le ha cobrado 600 euros por arreglar su silla de ruedas, y le contestan que ?sólo hay que darle un golpe al motor, de vez en cuando, pa? que vuelva a funcionar?. ?Entonces, lo vimos claro -explica el gerente Pedro Fernández Bravo-: ¿por qué no montábamos nuestro propio taller de reparación para los miembros de nuestra Asociación y otros discapacitados físicos de la zona??.

Fundada en 1996, la Asociación Plataforma sin barreras es una entidad, con sede en Trujillo, cuya misión es la integración social de las personas con discapacidades físicas y sensoriales. Para lograr este objetivo, siempre se ha distinguido por su lucha por la superación de los prejuicios que todavía la dificultan, los obstáculos arquitectónicos, así como la promoción de la formación de los miembros de este colectivo en su Centro Especial de Empleo.

La Asociación (www.plataformasinbarreras.org), que cuenta con cerca de 400 miembros entre socios y colaboradores, persigue, según consta en sus principios fundacionales, ?la eliminación de las barreras mentales: la lucha contra la discriminación, tanto del entorno, como la propia, intentando demostrar que los discapacitados somos personas iguales a las demás, aunque con nuestras propias limitaciones y diferencias?.

Sin embargo, aunque bien pensada y cargada de las mejores intenciones, la idea de montar un taller de reparación de material protésico, llevado por tres miembros de la Asociación, no acaba de cuajar. ?Nos faltaba la especialización necesaria para el tipo de productos, de gran complejidad técnica, que se tenían que arreglar?, explica el gerente de la entidad. Antes de sufrir un accidente laboral cuyas secuelas le obligan a utilizar una silla de ruedas para moverse -?porque moverme sigo moviéndome y no paro?, apunta-, Pedro Fernández había sido concejal en el consistorio de Trujillo y sabía por experiencia que, a veces, hay que moverse para que la administración le ayude a uno. Aunque sea a ayudarse a sí mismo.

Es así como, un poco desorientados por la falta de salida comercial del proyecto, pero en absoluto desalentados, a mediados de 2004 deciden acudir al Secretario de Relaciones con el Ciudadano para ver cómo pueden ampliar su mercado y éste, a su vez, los pone en contacto con el Servicio Extremeño Público de Empleo (SEXPE).

Estos contactos con diferentes departamentos de la Junta de Extremadura les conducen finalmente, en agosto de 2005, al recién creado Gabinete de Iniciativa Joven (GIJ). Allí, tras una primera reunión les invitan a enviarles un documento más detallado sobre el proyecto para llevar a cabo los obligados estudios de viabilidad.

?En general, todos los departamentos de la Junta, hasta el propio Ayuntamiento de Trujillo, se han portado maravillosamente con nosotros y nos han ayudado en todo lo que han podido con este proyecto, subraya Pedro Fernández. Pero en el GIJ es donde han coordinado todos estos esfuerzos administrativos, asesorándonos para sacarlo adelante, y nos han animado a replantearnos nuestros esquemas iniciales y a ser más ambiciosos?.

Este replanteamiento les conduce a aspirar ahora, no sólo a la reparación, sino al diseño y fabricación de productos ortopédicos de calidad en una auténtica factoría gestionada por la Asociación: dos naves de 200 m2 cada una, ubicadas en el nuevo polígono de Arroyo Caballo. La previsión es que, a mediados del año 2007, salgan de estas instalaciones los primeros aparatos ortopédicos fabricados en Extremadura por una plantilla mayoritariamente formada por personas con discapacidades físicas, para los miembros de este colectivo en esta región y la vecina Portugal.

La nueva empresa responde al nombre de Ortopedias de Extremadura, Ortoprotex, y entre otros muchos productos, tiene previsto sacar al mercado una media de 3.000 sillas de ruedas anuales.

Según explica el gerente de Plataforma sin barreras, desde el GIJ les han ayudado también con el obligado estudio de mercado, la búsqueda de los socios inversores necesarios así como en la obtención de las ayudas del Decreto por un importe total de 30.000 euros, destinados a proyectos de logística y a lograr los contactos necesarios de distribución.

A tenor de las últimas estimaciones, un 4% de la población de la comunidad extremeña, unas 40.000 personas, sufren alguna discapacidad física o psíquica en diferente grado, debido a enfermedades degenerativas o genéticas, accidentes o complicaciones propias de la tercera edad, lo que les obliga a utilizar algún tipo de prótesis o aparato ortopédico, desde unas simples muletas a sillas de ruedas con sofisticados motores eléctricos.

El problema, para la mayoría de ellos, surge cuando las principales empresas del sector son marcas extranjeras cuyos centros de distribución y mantenimiento se encuentran en Bilbao, Valencia o Barcelona, un factor que, más allá de los lógicos inconvenientes para los consumidores extremeños, también implica importantes costes en tiempo y dinero, tanto para estos como para la sanidad pública.

Dar servicio al colectivo

Otro factor económico fundamental es que, por el mero hecho de estar catalogados como ortopédicos, los componentes de muchos de estos aparatos sufren un incremento de hasta el 300% sobre su valor real en el mercado, ?aunque sólo se trate de unos simples neumáticos para una silla de ruedas, que son prácticamente iguales a los de cualquier bicicleta?, subraya Pedro Fernández. Es por ello que este proyecto innovador de la Asociación Plataforma sin barreras ?nace de la misión, casi moral, de acercar y abaratar unos productos que resultan de primera necesidad para un importante colectivo de nuestra sociedad?, afirma. En otras palabras, el objetivo de la Asociación es dar servicio a este colectivo con unos precios mucho más asequibles. Ello será posible, entre otras cosas, por el hecho de que, al tratarse de una entidad sin ánimo de lucro, reinvertirán todos los beneficios en la investigación y mejora (I+D+i) de los nuevos productos que diseñen.

?¿Quién mejor que los propios discapacitados para idear los aparatos ortopédicos que necesitan?? apunta el gerente de la Asociación-. Creemos que somos innovadores, no sólo por el modelo empresarial y social que proponemos, sino por el convenio que vamos a firmar con la Universidad de Extremadura para diseñar con ellos, codo con codo, nuestros propios aparatos?.

Un modelo para exportar y exportable

Otra de las ventajas competitivas de Ortoprotex es la utilización de su red de asociados y su página web para distribuir sus productos y dar un mejor servicio al colectivo. Con el tiempo, esperan no sólo cubrir todas las demandas del sector en Extremadura, sino las de otras comunidades y, tal vez, acabar exportando también su modelo empresarial.

?La política de integración del discapacitado no puede basarse en una dependencia total de la Administración, en que ésta acabe siendo una hermanita de la caridad – afirma Pedro Fernández -. Se ha de asumir que tienen unos derechos y unas obligaciones, al igual que el resto de los ciudadanos, pero facilitándoles la posibilidad de crear riqueza y ser útiles a la sociedad. Y la imaginación aplicada a la innovación ayuda a encontrar nuevos modelos, como este proyecto innovador, para que puedan aprender a valerse por sí mismos?.

Ideas Fuerza:

– Ortoprotex nace con la misión tanto de dar trabajo a minusválidos físicos y de ofrecer productos ortopédicos de calidad a precios más asequibles.

– La idea innovadora radica en que los propios discapacitados intervendrán en el diseño de los aparatos gracias a un convenio con la Universidad de Extremadura.

– Al tratarse de una entidad sin ánimo de lucro, reinvertirán todos los beneficios en la investigación y mejora (I+D+i) de los nuevos productos que diseñen.

– ?La imaginación aplicada a la innovación es ideal para que los discapacitados encuentren nuevos modelos que les ayuden a valerse por sí mismos?, concluyen desde la Asociación.