Martí Guixé

11 Oct Martí Guixé

Diseñador industrial y de interiores.  Formado en Barcelona y Milán. Tras trabajar como consultor de diseño en Seúl a mediados de los noventa, hoy vive entre Berlín y Barcelona. Quizás por esto Fast Company le calificó como «the ultimate nomadic worker».

Desde 1998 mantiene una fructífera colaboración con Camper, marca de calzados para la que ha diseñado tiendas por todo el planeta. También ha trabajado con Authentics, Camper, Cha-Cha, Chupa-Chups, Desigual, Droog Design, Saporiti, Watx. Más en su página personal.

Resumimos la conversación en la que Martí Guixé nos introduce en su  visión personal del diseño.

El concepto, primero. Me considero exdiseñador. No trabajo con objetos, mi material son las ideas y con ellas construyo productos.

Si el concepto es bueno, la ejecución funcionará independiente del contexto de realización. Sea  un objeto de lujo, sea un objeto para el supermercado.

Flamp (fosfor Lamp), 1998
Design: Martí Guixé
Production: H20
Photography © Inga Knölke

Contemporaneidad. Diseño con parámetros que buscan una relación con la sociedad actual. Un mundo de carácter temporal y en cambio constante.

Creo que el Top Manta es el mejor diseño actual de retail. En poco más de un metro cuadrado colocas todos los productos de la forma más visible para el comprador, y en la zona más caliente de la ciudad. Además puedes variar la posición dependiendo de factores como el flujo de público, el tiempo, la hora, tus ganas.

MUSEUM GUIXE in Magasin3 projects
Stockholm, 2005
 

Solo si existe la intención de vivir el mundo actual de forma contemporánea tienes la posibilidad de producir productos que sean realmente fruto del momento en que vivimos. Significa tener una ventaja de unos 5 años por delante de los departamentos de marketing y de I+D convencionales.

Desmaterializar el diseño. En el momento actual somos muchos los que no queremos más objetos, que no vivimos el romanticismo por las cosas materiales. Queremos experiencias, emociones. Pero necesitamos las funciones que los objetos nos proporcionan.

Una paradoja que intento solucionar con desmaterialización del objeto, intentando que quede la función pero que desaparezca su cuerpo.

Camper Velcro shop?London, 1998,

En la tienda de Camper en Londres desaparecen las estanterías para los zapatos y las sustituyo por un velcro que pega los modelos directamente en las paredes. Una pequeña tira adhesiva suple la función de unas grandes estanterías.

Camper El Triangle – Barcelona, 1998

En este diseño desaparece el mobiliario y las mismas cajas de los zapatos apiladas asumen la función de escaleras. Un objeto suple la función de otro objeto.

GAT FOG PARTY, Performed CASCO,
Utrech September 2004

Hace un año se hizo una presentación en una galería de Utrech en la que el gin tonic se dispersaba por el aire mediante una tecnología utilizada en contextos agrícolas. Este prototipo rompe el líquido en partículas muy pequeñas y las pone en flotación en el ambiente, emergiendo en el espacio una niebla de gin tonic.

Diseño Retro, hoy. Debido a la imposibilidad que tienen la mayoría de agencias creativas para imaginar un futuro, vivimos un momento de diseño retro, de nostalgia por el pasado, una vuelta al romanticismo del objeto.     Incluso un gadget tan contemporáneo como el iPod  de Apple no deja de ser una reinterpretación de los diseños que Dieter Rams hizo para la Braun  hace muchos años.   Ha habido momentos más creativos como en el diseño italiano de los años 60-70, que se consolidó con la exposición de 1972 organizada por Emilio Ambasz en el MOMA,  Italy, a new domestic landscape.  
Las mejores ideas nunca provienen del mundo del diseño. En la Bienal de Venecia  me sorprendió un pieza de videoarte. Aparecía la idea de unos balseros cubanos, los cuales revertían el uso de un objeto tan cotidiano como una mesa en una barca. Esta doble funcionalidad  –que proviene de una necesidad–, me parece tan sofisticada que entra muy bien en los parámetros de complejidad en que nos movemos en nuestro mundo contemporáneo.  
La culpa fue de ?¡Internet!. A veces me pregunto por qué en mi generación –la que surgió en los noventa — no hay empresarios basados en productos de diseño, como los que sí surgieron en la España de los ochenta.   En buena medida, creo que en aquella época todo el quería ganar dinero estaba metido en la nueva economía. Diseñadores y empresarios. En nuestro país, existe hoy un gap generacional por lo que a emprendedores de diseño contemporáneo atañe.