20 Nov Innovación y caos
Por Narcís Mirandes
mig-marketing.com
Observamos un creciente interés de las marcas por asociarse a las últimas tendencias que se viven en la calle. Ejemplos podemos encontrar muchos: las webs súper creativas de Nike o Adidas, lo muñecos que aparecen en la publicidad de Opel o el spot de Audi que recuerda un video de You Tube.
Asociar la marca a las nuevas tendencias es seguramente una estrategia planificada para renovar, mantener viva la marca y acercarse a un público concreto. Muchas de estas iniciativas son muy creativas, innovadoras, nos enseñan cosas que normalmente no se ven. Nos sorprenden y aportan aire fresco a la comunicación.
Adidas o Nike por ejemplo encargan el diseño de muchos de sus espacios web a diseñadores y publicistas de vanguardia. Si visitáis las webs podéis ver cosas realmente muy bien hechas, sorprendentes y innovadoras. Al visitar este tipo de webs también tienes una cierta sensación confusión y desorden. No siempre hay unidad de diseño, una personalidad definida y diferenciada de marca y con frecuencia tienes graves dificultades para saber donde estas en cada momento.
Otro ejemplo lo encontramos en los «toys» o toyz». Son muñecos, pequeños juguetes dirigidos sobretodo a adultos. Es una nueva tendencia que podemos encontrar en la web, tiendas especializadas, tiendas de museos o librerías especializadas en arte. Acostumbran a estar diseñados por artistas, gente relacionada con la moda, los graffiti o los comics. Se han puesto de moda en los últimos tiempos pero quizás en sectores mas bien minoritarios. Hay quien los utiliza como elementos de decoración, otros los consideran pequeñas piezas de arte o de coleccionismo. En definitiva son objetos de arte que se transforman en objetos de consumo y que se han convertido en iconos de la modernidad urbana. Podéis ver algunos en: subcutanspoon.com y uglydolls.com. Recientemente la marca de coches Opel ha utilizados unos peluches en un spot de televisión. En realidad son una evolución de unos «toys» de un artista alemán.
Relacionar las marcas con las nuevas tendencias puede ser muy bueno para renovar, para conectar con nuevos públicos, incluso para liderar cambios. A pesar de ello, es preciso que estos elementos de innovación estén presentes en otros ámbitos de la empresa. Si el punto de venta, el personal, la indumentaria, el logotipo, los folletos no están en sintonía, este paso adelante puede ser incluso contraproducente.
Las empresas pueden aprender de la innovación y las nuevas tendencias en el mundo del arte y la cultura urbana. Es bueno que las marcas reflejen la realidad que les rodea y a veces, incluso tiene que avanzarse.
Una cierta dosis de caos y modernidad puede ser necesaria para la innovación y el cambio, pero un caos descontrolado sin una estrategia de marketing puede llevar a la confusión en la imagen de marca.
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