Cervi

19 Feb Cervi

Cervi SA fue fundada en 1975 con el objetivo de comercializar e importar conductores eléctricos industriales. En el año 1988 inició un proceso de expansión comercial con la apertura de una delegación en Valencia. Este crecimiento continuó en 1989 con la inauguración de la filial de Arrigorriaga (Vizcaya), que cubre el norte peninsular y en la que participan con un 60 % del capital, y con la apertura de la delegación de San Fernando de Henares (Madrid), que cubre el centro de la Península. Hoy en día, Cervi SA cuenta con más de 5.000 m2 de instalaciones distribuidos por toda la geografía española y con una facturación superior a los 21 millones de euros (2005). Actualmente tiene su sede principal en Terrassa (Barcelona). Cervi SA se ha especializado en la distribución de cables para telecomunicaciones, incluidos los servicios móviles, la robótica, la electrónica, la telefonía y el uso industrial. Dispone de más de 4.000 referencias de productos en su catálogo.

Antecedentes tecnológicos

Hasta mediados de 2001, Cervi SA disponía de un sistema en producción VAX de Digital Equipment Corporation. En el año 1992, esta última empresa fue adquirida por Compaq, que empezó un proceso de venta de los activos de Digital. Hacia finales de los noventa, VAX dejó de actualizarse. Cervi SA tenía 16 conexiones simultáneas contra el VAX, que era lo máximo que soportaba el sistema, y en ocasiones las sesiones se colapsaban. La entrada oficial del euro en 2002 puso sobre la mesa una fecha máxima de migración hacia otro sistema, ya que no había posibilidad de actualizar la aplicación, con lo que el sistema VAX había quedado obsoleto.

Descripción de la solución implantada

A propuesta del departamento de telecomunicaciones de Cervi, se impuso la línea de trabajar con software libre y Linux. Para poder llevar a cabo la gestión de la empresa se desarrolló una aplicación a medida en lenguaje PHP y base de datos MySQL. Se puede acceder a ella mediante cualquier navegador vía web a través de la intranet, y dispone de módulos para gestionar completamente artículos, fabricantes, pedidos y usuarios.

Esta aplicación se encuentra en dos servidores de producción que dan servicio a las cuatro oficinas de la empresa y dos servidores más de replicación y sincronización de la base de datos MySQL, lo que permite que la solución sea redundante en caso de fallos de hardware. Para realizar estas tareas, se ha instalado el programa Samba, que permite acceder a redes Windows para obtener ficheros a fin de enviar datos a entidades bancarias, compartir ficheros con clientes Windows e imprimir. Asimismo, están configurados los servicios LPR para la impresión local y remota de facturas e informes.

Captura de pantalla de la aplicación de gestión PHP de Cervi SA.

Finalmente, cuentan con el software de replicación de MySQL para la sincronización en directo de producción y los sistemas de copias de seguridad (la base de datos principal ocupa algo menos de 1 GB).

Para monitorizar el estado de los diferentes servicios de red se han utilizado los programas Nagios y NetMGR, que ayudan en la estimación de gestión de recursos.

Factores clave del éxito

El hecho de que Linux facilite la administración remota del sistema permite que los técnicos de la empresa GNUnetworks, que tiene asignada la administración de la red, puedan realizar el mantenimiento y solucionar incidencias sin tener que desplazarse a la sede del cliente. Asimismo, dado que se trata de un sistema abierto de base de datos, permite capturar datos y procesarlos posteriormente para, por ejemplo, el tratamiento de informes.

Según Cervi SA, una de las claves del éxito de la nueva solución es su solidez, ya que está siempre disponible, sin interrupciones en el uso de los sistemas básicos para el día a día de la empresa. Los responsables de Cervi SA también destacan su rapidez y, en cuanto al proceso de facturación de final de mes, observan que «antes el ordenador podía estar calculando la facturación unas dos horas. Ahora la calcula en 10 segundos. Hablamos de procesar, en estos segundos, de 3.500 a 4.000 albaranes y de hacer unas 850 facturas».