Ali Hussein, InnoCentive

Ali Hussein, InnoCentive

 

 

Ali Hussein es Chief Marketing y Vicepresident of Global Markets de InnoCentive,  el broker online de conocimiento que acerca a los científicos de mayor nivel, los desafíos de R&D que presentan empresas de primera línea en todo el mundo.

 

Lo que sigue es un resumen abreviado de la entrevista que mantuvimos con Alí Hussein y que en su momento publicamos  IF/Papeles de Infonomia, nº 26.

 

 

 

 

Las compañías fijan  sus desafíos en el Web de InnoCentive, donde una comunidad global de más de 60.000 científicos tienen la oportunidad de someter sus soluciones a problemas exigentes. Una solución viable supone para el científico una recompensa financiera de hasta   USD $100.000.

 

Hasta  hoy (2004) hemos atraído a más de dos docenas de  multinacionales. Clientes orientados  a la innovación en sectores que van desde las   ciencias de  la vida a los productos de  gran consumo.  Algunas empresas    en busca de soluciones  son  BASF, Boeing,  The Dow Chemical Company, Eli Lilly and  Company, Henckel and  Procter & Gamble.

 

Más de 60.000 investigadores y científicos de primera línea de 150 países  se han unido  a la comunidad.  Sus  soluciones han producido un retorno de la inversión que son  muchos múltiplos superior a las  aproximaciones  tradicionales en  R&D.

 

Los científicos  se implican  por la emoción de utilizar su conocimiento y habilidades para modelar  el futuro de la innovación científica global.  Como líderes en sus respectivos  campos de la química, la bioquímica, la biología, la ingeniería o la aeronáutica,  los miembros de InnoCentive se sienten atraídos por los desafíos intelectuales que proporcionan  la búsqueda del descubrimiento científico.

Reconocimiento y remuneración contribuyen a que el científico   se  sienta cautivado. La recompensa es muy tentadora    para  los científicos,  independientemente de su localización.

 

 

 

 

Tradicionalmente los científicos de los países que carecen  de  abundancia o de adelanto tecnológico  están obligados a emigrar para tener éxito y ganar el reconocimiento en su campo. Esta «fuga de cerebros? sólo está exacerbando el desequilibrio de la ?energía científica? mundial.  

 

Mientras que los descubrimientos  y la investigación puntera  prosperaban  en naciones como Rusia y los Estados Unidos, los científicos  de otras partes menos  desarrolladas, a menudo,  no podían utilizar su potencial científico  al completo.

Ahora, gracias a InnoCentive, un químico en Kraków, un biólogo en Kazakhstan o un ingeniero aeronáutico en Beijing pueden permanecer en su país, a la par que tienen acceso y solucionan importantes problemas de  R&D  por encargo de corporaciones renombradas.  Estos individuos pueden ganar sumas substanciales de dinero sin tener que emigrar a un país extranjero.

 

En muchos países  ya  llaman a este  fenómeno «fuga de cerebros a la inversa»,  porque  los científicos pueden trabajar en problemas desafiantes sin tener que  abandonar sus hogares.

 

En China, InnoCentive ha fomentado  las relaciones con la Universidad de Beijing de  Tecnología Química, la Academia China de Ciencias, la Universidad de Lanzhou y la Universidad de Beijing, proporcionando a  jóvenes científicos   la oportunidad de afilar sus habilidades científicas trabajando  en problemas  a los que antes no  hubieran  tenido acceso.

 

 

 

 

 

Nuestra aproximación a la  propiedad intelectual cumple con   los requisitos de compañías,  instituciones académicas y   científicos  líderes a nivel mundial. Nos  enorgullece   tomar todas las precauciones necesarias para proteger los intereses de ambas partes:  empresas y de científicos.

 

Sólo  InnoCentive y la empresa que fija el desafío tienen acceso a  las soluciones propuestas. Al mismo tiempo, empresa  y científico firman un acuerdo de confidencialidad.   Finalmente,  y según  el protocolo  aceptado por  el científico, si la empresa  selecciona su  propuesta  como «la  mejor posible», antes de percibir  cualquier recompensa financiera, el científico deberá  transferir  a favor de la empresa todas los derechos de  propiedad  intelectual de la solución.

 

Eli Lilly proporciona la ayuda financiera a InnoCentive,  pero  ambas  son entidades totalmente separadas, con localización y personal independiente.

 

Eli Lilly es apenas una de muchas compañías que  se benefician  del recurso científico global proporcionado por InnoCentive. Con la protección de la confidencialidad de InnoCentive,  los científicos trabajan como individuos anónimos que solucionan desafíos anónimos. Si  de alguna cosa  nos ha servido el estar asociados a una compañía renombrada y consolidada  como Eli Lilly ha sido  solamente para aumentar el acceso de InnoCentive al mundo del R&D científico.

 

Las empresas han experimentado el valor de InnoCentive: están descubriendo soluciones a los problemas del R&D más rápidamente y por  menos dinero;   tienen acceso a recursos para la solución de problemas adicionales,   sin  barreras  nacionales e institucionales, y atenúan  el riesgo, el tiempo y los recursos  en comparación   a  las aproximaciones tradicionales en investigación.

 

 

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Versión íntegra de la entrevista en Ramon  Bori, «Innocentive: Conocimiento e innovación en la red», Papeles de Infonomía, nº 26, julio-agosto, 2006.

 

 

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